Quizás nadie se ha parado a pensar (salvo los afectados) cómo depositan la basura en los contenedores las personas con una discapacidad motórica o dificultades de movilidad. Es prácticamente una misión imposible accionar la palanca que levanta la tapa y depositar la bolsa o llegar a los huecos por los que dejar caer el vidrio o el papel. Pues bien, este problema va a tener solución gracias a la existencia de contenedores con un agujero a una menor altura y en el cuerpo del recipiente.
El único inconveniente es que se llenan antes que los normales pero ello no ha sido impedimento para que llevar a cabo esta iniciativa. «Nos complicarán un poco la gestión porque se llenan una tercera parte menos pero pensamos que es muy cómodo para las personas con discapacidad».
El objetivo es extender el proyecto piloto a todas las ciudades.
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