El alquiler de ortopedia se extiende por las farmacias

Son cada vez más las oficinas de farmacia que se lanzan a implantar nuevos servicios e innovaciones con el objetivo de obtener una mayor rentabilidad. Uno de estos servicios es el alquiler de productos ortopédicos. Los clientes pueden acudir a la botica y disponer de los productos que necesiten por periodos de tiempo limitados, desde días sueltos hasta meses, evitando pagar grandes cantidades por productos que posiblemente utilicen una o dos veces. Así lo explica Elsa Climent, encargada de la categoría de ortopedia en la Farmacia Enriqueta López en Barcelona: "Ofrecemos este servicio desde hace cuatro años, sobre todo, para productos como son las sillas de ruedas, caminadores, muletas o bastones".

El tamaño y el coste de este tipo de productos hacen que el servicio de alquiler se convierta en una buena opción para los pacientes. "También sirve como una forma de probar el producto antes de comprarlo y comprobar si el paciente está cómodo", explica Climent. De este modo, apunta, "se evitan gastar dinero para tenerlo por casa ocupando espacio sin darle ningún uso". Sobre todo, Climent se refiere a las sillas de ruedas, eléctricas o normales, pues su tamaño es considerable y puede suponer un coste alto para las familias.

En el caso de esta farmacia, para el alquiler de cualquier ayuda técnica, explica Climent, es necesario abonar por adelantado un depósito en concepto de fianza que se devolverá cuando se compruebe que el artículo devuelto está en perfectas condiciones de uso y limpieza. De este modo, la oficina de farmacia se asegura que los productos se mantengan en las condiciones óptimas para poder volver a ser alquilados. A su manera de ver, este servicio es, además, una forma "de dar visibilidad a la farmacia" pues son muchas las perdonas, dice, que llaman para informarse a la botica o que, una vez que alquilan el producto, vuelven para otros servicios.

En este sentido, cabe destacar que la Farmacia Xapellí en Rubí (Barcelona) ofrece también la posibilidad de alquilar grúas o camas, entre otros. Aunque aseguran que es un servicio que funciona de forma intermitente, reconocen que para productos de gran tamaño es rentable para el paciente y tiene salida en la botica. Además, la farmacia ofrece la posibilidad de realizar un alquiler con derecho a compra. "Son muchos los que alquilan un producto y acaban comprándolo por su comodidad, porque ya les compensa por el tiempo que lo llevan utilizando...", explican.